La propiedad intelectual es el conjunto de derechos que corresponden a los autores y a otros titulares, tales como artistas, productores u organismos, entre otros.

El pasado 26 de abril se celebró el día mundial de la propiedad intelectual y este año se ha querido dar el foco a las pequeñas y medianas empresas.

La campaña de este 2021 brinda la oportunidad de celebrar el papel que desempeña la propiedad intelectual en el apoyo prestado a la creatividad y a la innovación.

Este año, bajo el lema “La PI y las PYMES: Para que las ideas lleguen al mercado”, la OMPI pone el foco en la importancia que tiene la propiedad intelectual para las pequeñas y medianas empresas.

Mientras las economías de todo el mundo lidian con las consecuencias económicas derivadas de la crisis sanitaria provocada por la COVID-19, el Día Mundial de la Propiedad Intelectual 2021 destaca la importancia de las pymes y el papel esencial que desempeñan en nuestra economía y la sociedad en general.

El director general de la OMPI, Daren Tang, quiso calificar a las pymes como los “héroes silenciosos” de la economía mundial al afirmar que constituyen un motor de crecimiento en un mundo posterior a la pandemia. Tang señaló que las pymes conforman el 90% de las empresas de todo el mundo y constituyen el 70% del empleo mundial.

El director general, que asumió el cargo el año 2000, ha convertido el apoyo a las pequeñas empresas en un asunto prioritario.

En contraposición, el uso que hacen las pequeñas y medianas empresas de la propiedad intelectual como instrumento estratégico para su desarrollo sigue siendo reducido. Esto provoca que este segmento empresarial sea menos competitivo e innovador en un mundo globalizado que requiere de un uso adecuado y eficaz del sistema de derechos de propiedad intelectual.

En el marco normativo nacional, la legislación española, mediante la Ley de Propiedad Intelectual, ofrece una serie de mecanismos de protección de los derechos de propiedad intelectual. Es la Ley de la Propiedad Intelectual la que protege las creaciones literarias, artísticas o científicas.

Vulnerar los derechos de propiedad intelectual constituye una infracción que puede conllevar el pago de indemnizaciones a los titulares de los derechos, e incluso, en algunos supuestos, puede llegar a constituir un delito, sancionado con penas de prisión.

Por ello, este año resulta necesario otorgar el protagonismo a las pequeñas y medianas empresas, con el fin de que este segmento empresarial pueda afrontar el desafío de implementar herramientas que les permitan identificar, gestionar, explotar y proteger los derechos relativos a la propiedad intelectual, de manera que pueda no solo mitigar su vulnerabilidad ante las diferentes crisis sociales y económicas que han tenido y están teniendo lugar a nivel mundial, sino, además, fortalecer su posición y crecimiento en un mercado cada vez más dinámico y complejo.

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